martes, 29 de noviembre de 2011

Martha Wainwright canta La Foule de Edith Piaf

La legendaria canción de Edith Piaf interpretada por Martha Wainwright.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Fotos de Bretagne ( 2 )

Vannes
Faro de Belle-Île


Dinan

Le Cap Fréhel







viernes, 18 de noviembre de 2011

Le Mont Saint-Michel en 3D

He encontrado en internet este curioso video en el que a través de Google earth  nos presentan una panorámica del Mont Saint-Michel.


jueves, 17 de noviembre de 2011

Fotos de Bretagne





Vista desde la muralla de Saint malo
 


Le cap Fréhel
 


Vista de Saint Malo
  


la bahía de Saint Malo
  


Le Mont Saint Michel
 

La fortaleza de Fougères
 

Le Fort la Latte
 









viernes, 11 de noviembre de 2011

HHhH Laurent Binet


Laurent Binet

HHhH: El cerebro de Himmler se llama Heydrich ese es el significado del enigmático título y lo que se decía en las SS de Reinhard Heydrich, jefe de la Gestapo, considerado el hombre más peligroso del Tercer Reich y una de las figuras más enigmáticas del nazismo.
A la derecha detrás de Hitler: Heydrich

Edición francesa de HHhH
Laurent Binet se obsesiona con Reinhard Heydrich cuando su padre le cuenta su historia siendo un niño. El relato de cómo dos partisanos, el uno checo y el otro eslovaco, consiguieron eliminar al verdugo, al carnicero, a la bestia rubia, tres de los sobrenombres con los que fue conocido, se enquistó en su subconsciente y creció poco a poco hasta que su mente de escritor  tiró del hilo para contar la historia.
Jozef Gabčík
 
Jan Kubiš

 Conocemos toda la trama desde el principio. No hay sorpresas: Los dos partisanos consiguen asesinar al jerarca Nazi y asestar un duro golpe a las SS que pagarán con su vida. Perseguidos por los Nazis, se refugiarán en la cripta de una iglesia de Praga y resistirán el sitio de sus perseguidores en la cripta de la iglesia hasta que, conscientes de su captura, se quiten la vida para evitar un mayor suplicio. ¿Dónde está entonces el intríngulis de la novela? El interés de la historia reside en que asistimos maravillados a la gestación de la novela de la que el propio Laurent Binet es protagonista. Desde la búsqueda de información, las películas que encuentra y visiona relacionadas con la historia, los libros que lee, los viajes que realiza y como elige los mimbres de su historia para construir una ficción deudora de la realidad y que no traicione los hechos en los que está basada.
Portada española de HHhH

El coche de Heydrich tras el atentado
La obsesión del autor es ceñirse a los acontecimientos y no novelar, no añadir detalles de ficción que adornen la historia pero que no estén contrastados. Una antinovela que sin embargo se demuestra apasionante porque al interés de los hechos históricos se suma una interesantísima autoficción, una amenísima metaliteratura en la que asistimos sorprendidos a la construcción del relato, cuya conclusión ya conocemos, sin que el doble interés decaiga; el doble interés de ver como el novelista lucha contra sus problemas para construir su novela, y por otro lado como los protagonistas actúan para desarrollar la trama que sustenta la autoficción, es decir, la operación Antropoide que acabó con el asesinato del que era llamado el cerebro de Hitler.




lunes, 7 de noviembre de 2011

Cheverny-Moulinsart

A lo largo del curso del rio Loira hay más de setecientos castillos. Algunos de ellos son de visita obligada, otros son muy interesantes y quizá en otras latitudes atraerían a miles de turistas al cabo del año. Sin embargo no soportan el agravio comparativo con sus vecinos de pasado más esplendoroso. Uno de los principales es el castillo de Cheverny que por si solo merece la pena ser visitado. Sin embargo este castillo tiene un atractivo añadido a sus encantos y es que fue elegido por Hergé para que en sus historias lo habitaran El capitán Haddock y Tintin. El gusto por el realismo del autor de nuestro personaje es conocido. Muchos de sus personajes y dibujos están directamente basados en personajes reales o en imágenes identificadas, así que para el castillo de Moulinsart se inspiró en este fabuloso castillo del siglo XVI que desde hace seiscientos años pertenece a la misma familia y que en la actualidad es propiedad del Marqués Charles Antoine de Vibraye. Desde el año dos mil uno en las antiguas caballerizas se puede visitar una preciosa exposición realizada conjuntamente con la fundación Hergé de Bruselas y que representa las viñetas que se desarrollan en el castillo a lo largo de los diferentes álbumes de la serie. El álbum en el que aparece por primera vez el castillo es precisamente el que da título a la adaptación al cine El secreto del Unicornio y como es lógico su aparición en la pequeña pantalla ha supuesto para los habitantes del castillo una nueva emoción.
 En el año dos mil siete visité el castillo y la exposición y al regresar a España publicaron en el suplemento de viajes del periódico El País la siguiente reseña.
A lo largo del curso del rio Loira hay más de setecientos castillos. Algunos de ellos son de visita obligada, otros son muy interesantes y quizá en otras latitudes atraerían a miles de turistas al cabo del año. Sin embargo no soportan el agravio comparativo con sus vecinos de pasado más esplendoroso. Uno de los principales es el castillo de Cheverny que por si solo merece la pena ser visitado. Sin embargo este castillo tiene un atractivo añadido a sus encantos y es que fue elegido por Hergé para que en sus historias lo habitaran El capitán Haddock y Tintin. El gusto por el realismo del autor de nuestro personaje es conocido. Muchos de sus personajes y dibujos están directamente basados en personajes reales o en imágenes identificadas, así que para el castillo de Moulinsart se inspiró en este fabuloso castillo del siglo XVI que desde hace seiscientos años pertenece a la misma familia y que en la actualidad es propiedad del Marqués Charles Antoine de Vibraye. Desde el año dos mil uno en las antiguas caballerizas se puede visitar una preciosa exposición realizada conjuntamente con la fundación Hergé de Bruselas y que representa las viñetas que se desarrollan en el castillo a lo largo de los diferentes álbumes de la serie. El álbum en el que aparece por primera vez el castillo es precisamente el que da título a la adaptación al cine El secreto del Unicornio y como es lógico su aparición en la pequeña pantalla ha supuesto para los habitantes del castillo una nueva emoción.
 En el año dos mil siete visité el castillo y la exposición y al regresar a España publicaron en el suplemento de viajes del periódico El País la siguiente reseña.

EL VIAJERO HABITUAL MI AVENTURA
En el castillo de Tintín

CUANDO se visita el valle del Loira, en Francia, uno se acostumbra a los nombres regios que llenan las guías de viaje: Diana de Poitiers, François I, Enrique II, Leonardo da Vinci, etcétera. Cada castillo está relacionado con un personaje histórico. Figuras que han sido decisivas a la hora de definir los estilos decorativos y arquitectónicos que existieron en Francia desde el Medievo hasta el Renacimiento. Sin embargo, una de las fortalezas difiere del resto: la del Capitán Haddock y Tintín.
Una excelente manera de celebrar los 100 años del nacimiento de Hergé (nacido en 1907 en Etterbeek, un pequeño pueblo belga) es visitar el castillo de Cheverny. El autor de las aventuras de Tintín y Milú se inspiró en este conjunto de proporciones perfectas para dibujar Moulinsart, la morada del antepasado del Capitán Haddock, el irascible Caballero de Hadoque. El dibujante lo transformó en la residencia belga de este personaje en el cómic El tesoro de Rackham el Rojo.
Al castillo del álbum sólo le faltan, para ser idéntico al original, dos pabellones laterales. Las chimeneas, los techos, las ventanas, el cuerpo central e incluso el diseño de los jardines reproducen cada detalle del castillo de Cheverny. Y para perdernos en el imaginario de Hergé, nada mejor que pasearse por la exposición Los secretos de Moulinsart. Los dueños del castillo, junto a la Fundación Hergé, han recreado a tamaño natural las viñetas de Tintín donde aparece el castillo. En la muestra se tiene la impresión de estar dentro del cómic: se visitan los sótanos del castillo de Moulinsart donde fue enterrado Tintín en El secreto del unicornio; se curiosea entre los objetos de la habitación de este intrépido reportero; se inspecciona el taller del profesor Tornasol, donde se encuentra un submarino con forma de tiburón. Asimismo, nos podemos perder en la sala donde ensaya Bianca Castafiore (Las joyas de la Castafiore) o en el salón del anfitrión.
Quien sufra el síndrome de Tintín no debe abandonar el valle del Loira sin haber visitado Moulinsart. Es decir, Cheverny.



miércoles, 2 de noviembre de 2011

Crítica Cinematográfica.Las aventuras de Tintin: El secreto del Unicornio


Dibujo de Irene Ollo
La música de John Williams nos adentra una vez más en el universo Spielberg y ya los títulos de crédito marcan el tono de la historia que el famoso director nos va a contar junto a Peter Jackson; lo que nos espera es una mezcla de saltos trepidantes de una a otra parte de la historia y el homenaje continuo al espíritu de Hergé, mediante la inclusión en las imágenes de todo tipo de fetiches tintinescos que pueblan los demás álbumes del dibujante belga e incluso un cameo del artista.  La historia, por si queda alguien que no lo sepa, es el resultado de la fusión de tres álbumes de Hergé: El cangrejo de las pinzas de oro (del cual se extrae el momento en que Haddock y Tintin se conocen) y los dos álbumes que conforman una sola historia: El secreto del Unicornio y El tesoro de Rackham el rojo. Spielgerg y Jackson cortan y pegan las tres historias cogiendo de cada una los elementos esenciales para construir un guión que no pierde ritmo y respeta en lo esencial los tres libros aunque se toman muchas licencias que quizá no gusten a algunos puristas. De partida hay que dejar claro que en mi espíritu ocupa más espacio todavía que Tintin mi afición a las historias de aventuras y en especial a las de Indiana Jones. Así que el que puede ser considerado el principal defecto de la película por parte de los aficionados a los comics de Tintin, en mi visionado de la película ha supuesto un valor añadido ya que el ritmo de la película ligado al mejor estilo de Spielberg, y en concreto el sabor a Indiana Jones que destila toda la película (en el modo de presentar a los personajes, de llevar la acción de un escenario a otro mediante espectaculares transiciones, no dejar desfallecer ni por un momento la intriga) reconocemos al mejor Spielberg que nos monta en su cochecito de montaña rusa para dejarnos bajar tan solo cuando la historia llega a su fin. La tecnología: la imagen en tres D y la motion capture hacen que los personajes sean idénticos a los dibujados por Hergé en los comics sin esa sensación de máscaras y maquillaje excesivo que dejaban películas como Dick Tracy en las que para caracterizar a los personajes era necesario hacer desaparecer la expresión del actor. Evidentemente los actores que encarnan a los protagonistas no son reconocibles tampoco en Tintin, pero la expresividad de sus rostros es mucho mayor que la del mejor dibujo animado.
Inevitablemente la aventura llega a su fin y muy mal tiene que ir en taquilla para que no se lleve a cabo la trilogía anunciada por los dos directores. A mi modo de ver las aventuras de Tintin por fin han encontrado un digno modo de ser trasladadas a la pantalla.